Se recomienda montar las llantas nuevas (o las menos usadas) atrás para asegurar una mejor adherencia y un mejor control del auto en situaciones difíciles (frenado de emergencia o curva muy pronunciada) sobre todo en piso mojado y resbaloso.
La mayoría de los vehículos tienen tracción delantera, por lo que las llantas delanteras se desgastan más rápido que las traseras. El conductor está acostumbrado a un auto que tenga menos adherencia adelante.
Si se montan las llantas nuevas adelante:
- El conductor pensará que obtiene mayor seguridad al montarlas en esta posición por una costumbre errónea.
- Sobre piso mojado se perderá adherencia en el eje trasero que trae las llantas usadas y sobre el cual no se tiene control.
Si se montan las llantas nuevas atrás:
- El comportamiento del vehículo será óptimo (equilibrio de adherencia mantenido pero con un nivel de seguridad superior).
- Adherencia máxima sobre el eje trasero, el que el conductor no controla.